Cuando se habla inglés, hoy en día casi todo el mundo tiene como mínimo una buena base, y se intenta aprender otras lenguas latinas, a veces, es confuso recordar qué palabras del inglés se usan dentro del vocabulario de cada una y cuáles no, pues vivimos en plena recepción de anglicismos.
En algunos casos, e idiomas, estos anglicismos se adaptan y en otros no. Lo cual complica todavía más la situación. Al mismo tiempo, da la impresión de que la influencia está llegando hasta tal punto que se acepta casi todo, incluso, cuando la palabra tomada ya tenía algún sinónimo o cuando podría haber sido creada mediante algún otro mecanismo.
En el caso de Hispanoamérica, la influencia
del inglés es incluso mayor que en España, sobre todo, en México, país fronterizo
con EE.UU. Su gran frontera con el país norteamericano contribuye a que hagan
uso de un mayor número de anglicismos.
Existen otros casos curiosos como el de Colombia o Ecuador, donde se dice “un man”
en lugar de un chico, señor u hombre. También llama la atención el fenómeno del
“espanglish”, pero sobre esto, hablaremos otro día más detenidamente. Brasil
también ha tomado muchas palabras del inglés, algunas de ellas con adaptaciones
muy particulares, y entre Inglaterra y Francia, el intercambio de vocabulario ha
sido continuo, por lo que cada país tiene muchas palabras de la lengua del
otro.