Os dejo con ellos, espero que os sean de utilidad.
1. Corregir es tan
importante como saber corregir. La corrección debe realizarse de modo que los alumnos entiendan que se
han equivocado pero no les genere miedo a volver a equivocarse. Decir
simplemente “no”, una y otra vez, y dar la respuesta correcta puede resultar perjudicial para el alumno. Existen varios métodos de
corrección más efectivos. Por ejemplo, darle al alumno dos opciones, la
equivocada que ha dicho y la correcta, o preguntarle si está seguro de que esa es la respuesta correcta e inducirlo a encontrar la solución a través de otras preguntas para hacerlo pensar y que sea él el que perciba el error. De ese modo aprenderá a pensar y ganará confianza al descubrir la solución por sí mismo, no por una respuesta dada por el profesor.
2. Dar una contextualización
adecuada a las explicaciones de nuevos conceptos a través de ejemplos que
faciliten su comprensión y hagan al alumno imaginarse de forma adecuada el
contexto en el que se usaría esa expresión o frase. Esto le ayudará a visualizar las distintas situaciones en las que se puede ver en la necesidad de usar esa expresión y facilitará su memorización.
3. Mandar siempre deberes y hacer una buena corrección de los mismos aprovechando cualquier error para recordar lo aprendido en la lección anterior. Los ejercicios que los alumnos realizan en casa son el complemento ideal para memorizar lo aprendido durante la última clase y practicar la escritura. El ritmo de aprendizaje de un alumno que habitualmente hace los deberes de casa y otro que no, suele ser muy distinto.
3. Mandar siempre deberes y hacer una buena corrección de los mismos aprovechando cualquier error para recordar lo aprendido en la lección anterior. Los ejercicios que los alumnos realizan en casa son el complemento ideal para memorizar lo aprendido durante la última clase y practicar la escritura. El ritmo de aprendizaje de un alumno que habitualmente hace los deberes de casa y otro que no, suele ser muy distinto.
4. Repetir y repetir.
Es la clave en el aprendizaje de cualquier idioma. Lo que se aprende un día, si
no se pone en práctica y se repite continuamente se acaba olvidando. Es
importante que lo que se va construyendo sea a base de ir utilizando lo
aprendido anteriormente. Debe ser algo que crece. No sirve de nada aprender hoy sobre animales y no
hablar de otra cosa, la próxima clase sobre deportes y no hablar de otra cosa,
la próxima clase sobre profesiones y no
hablar de otra cosa…
5. Enseñar palabras y
expresiones que sean realmente útiles. Las que no, no se usarán y se
olvidarán. Recuerdo haber estudiado en distintas escuelas en las que el
profesor ponía en la pizarra las palabras que le iban viniendo a la cabeza,
muchas de las cuales memoricé pero nunca he llegado a usar. El vocabulario deber estar ordenado por
temáticas, sobre todo, en niveles básicos, e ir orientado hacia situaciones habituales. Recuerdo haber tenido que estudiar artículos sobre economía
cuando mi nivel era bastante elemental.
6. Hacer entender al
alumno cuáles son los mecanismos del idioma. En inglés los adjetivos
no tienen género, en chino existen los tonos, en francés los partitivos, en
alemán 4 declinaciones… Es muy importante dejar claro para qué sirven ese tipo
de cuestiones que no existen en nuestra lengua materna. A veces
nos sentimos en la obligación de tener que aprenderlos sin saber claramente
cuál es su utilidad.
7. Intentar que la
clase sea lo más amena posible. Aquello que nos entretiene nos hace
aprender con menos esfuerzo, nos ayuda a prestar más atención y hace que el
tiempo pase más rápido y queramos volver a tener otra clase así. Una clase
aburrida produce el efecto contrario. Descubre la forma de atraer la atención de tus alumnos y la clase resultará un experiencia agradable en lugar de una tortura.
8. Utilizar medios
audiovisuales. Es muy importante contar con buenos audios o videos que
ayuden a los alumnos a oír otros acentos, especialmente, si el
profesor no es nativo. No debemos olvidar que la mejor manera de aprender un
idioma es oyendo. Cuando seamos capaces de entender lo que dicen los hablantes
de una lengua seremos capaces de empezar a imitarlos y a partir de ese momento
nuestro ritmo de aprendizaje aumentará considerablemente.
9. Explicar la gramática
de la forma más fácil y simple posible. La gramática no se memoriza y se
pone en práctica en un solo día. Lo más fácil es explicar la gramática
básica mientras que lo más complejo se va aprendiendo con la
práctica, como ya expliqué en ¿Por qué los idiomas son tan difíciles? Creo que la idea de explicar las estructuras gramaticales como si
fuesen fórmulas matemáticas es un gran error, entre otras cosas, porque su
memorización no implica su uso adecuado a la hora de hablar. Una cosa es
pararte a pensarla y ser capaz de repetirla y otra, hablar con la suficiente
fluidez como para que salga automáticamente y sin esfuerzo.
10. Prohibir el uso durante la clase de cualquier idioma que no sea el que se va a aprender. Es
importante transmitir a los alumnos la idea de que el interior de aquella sala
es un lugar en el que se habla otra lengua, aunque evidente habrá alguna
situación o algún nivel más elemental en el que apoyarse en la lengua materna
será inevitable.
Buenos puntos, estimado Sergio. Felicitaciones.
ResponderEliminarMuchas gracias :)
EliminarEn alemán no hay 4 declinaciones. Hay 4 casos: Nominativ, Akkusativ, Dativ y Genitiv
ResponderEliminar